Pelotón de intercambiables

Tuesday, March 29, 2011

Lo dijimos hace varios meses en estas páginas y lo repetimos ahora: el pelotón de candidatos de la derecha neoliberal -Keiko, Toledo, Kuczynski y Castañeda- piensa y plantea más o menos lo mismo y haría un gobierno muy similar de ganar las elecciones. La única alternativa es la de Humala, que plantea un camino distinto para el Perú. Dijimos también que esta situación llevaba una polarización inevitable por número y calidad, entre el pelotón y Ollanta, que ahora se verifica en las encuestas. Los resultados continúan siendo impredecibles, pero lo ya ocurrido nos deja algunas lecciones.

La derecha se ha comprado, casi sin fisuras, el modelo en funciones, con su Constitución incluida. Sin embargo, esto la lleva a una situación sin salida. Continuar con lo mismo les impide consolidar la democracia. Necesitan reprimir al pueblo para seguir repartiéndose los beneficios del crecimiento entre unos pocos. El ejemplo de Islay que sucede en estos días donde balean a la gente que protesta desde helicópteros porque no quieren que la minería les quite el agua, es un caso ya emblemático. La democracia continúa sin establecerse definitavemtne en el Perú porque hay quienes perderían privilegios con ello y no están dispuestos a hacerlo.

Avanzan, mal que les pese a varios, las propuestas y se quedan atrás los candidatos engañosos y los insultos. Toledo y Castañeda, con el tremendo bajón experimentado en los últimos días, son una muestra de ello.

"La derecha podría reagruparse antes del 10 de abril"

La discrepancia entre lo que sucedía durante las últimas elecciones, 1990, 2001 y 2006, en las que ganaba el candidato mentiroso, que decía una cosa en campaña y hacía otra desde el poder, tiende a desaparecer. Ahora tenemos a Kuczynski como el candidato descarado del remate del Perú y el cholo barato y a Keiko enarbolando la dictadura si nos portamos mal. Propuestas terribles pero que están sobe la mesa y tienen sus seguidores. Mejor así para evitar palos de ciego y permitir un voto informado.

No sería extraño, sin embargo, algún tipo de reagrupamiento de la derecha antes del 10 de abril para impedir que Ollanta pase a segunda vuelta o lo haga con las justas. Keiko tiene el estigma de los latrocinios familiares, por ello el dilema estaría entre Kuczynski y Toledo. La plata o la demagogia. Diversas estrategias para ver si se juntan los votos que les faltan. No son cartas presentables, pero son cartas al fin y al cabo. El pueblo muy pronto tendrá la palabra.

Publicado originalmente en La República